lunes, 27 de agosto de 2007

Cueva de la Pileta, orgullo de Benaoján

Situado a 564 metros de altitud sobre el nivel del mar, en el valle del Guadiaro, Benaoján atesora un buen número de secretos naturales, consecuencia de su relieve accidentado. Dos formaciones geológicas destacan sobremanera:
El sistema Hundidero-Gato y la Cueva de la Pileta , una de las más importantes de España por sus pinturas prehistóricas.

Descubierta en 1905 por José Bullón Lobato, la Cueva de la Pileta fue antes la Sima de los Murciélagos, la Cueva de la Reina Mora y la Cueva de los Letreros. Fue el paleontólogo Hugo Obermaier el que la bautizó con el nombre actual por una pequeña pila en la que solía beber cada mañana en su camino hacia la cavidad.

Junto a las muestras de arte paleolítico, también alberga figuras negras esquemáticas del eneolítico y restos de materiales neolíticos (cerámica pintada e incisa). La cueva no sólo fue hábitat para el hombre prehistórico y que es un fascinante lugar de visita para el actual.

Tal es el valor de la Cueva de la Pileta que fue declarada Monumento Nacional en 1924. No es de extrañar por su importante conjunto de pinturas rupestres de cabras, caballos, cérvidos, bóvidos... 'La yegua preñada' y 'El pez' constituyen las famosas.